domingo, 21 de mayo de 2017

LA CONSTITUYENTE ES UNA GRAN OPORTUNIDAD PARA LOGRAR AVANCES

LOS NEGROS QUEREMOS PARTICIPAR  EN LA  CONSTITUYENTE  Y NO  ES PARA  TOCAR  NI BAILAR TAMBOR.(II)
Juan Veroes
El único Negro venezolano que mas cerca ha  estado del poder.

Tampoco  es para hacer una “Merienda de Negros” por lo que pedimos participar  como  miembro de la Asamblea Constituyente en formación, la cual  modificará  o  hará  cambios  sustanciales  en nuestra  actual CRBV. Lo que  nos  motiva a querer participar es para cobrar una deuda  histórica que  toda la  sociedad  venezolana tiene con nosotros  los  Negros  y  Negras  que habitamos  en este  país,  llamado hoy Venezuela, desde hace 163  años.  (en 1.854 dejamos de ser mercancía esclava y comenzamos  a ser  consideradas   personas según las  leyes de la época).

Cuando nuestros  antepasados, legalmente fueron declarados libres, se les echó a las  calles después que  los  amos recibieron un pago, por  parte  del  Estado, por el número de  esclavos que  tenían.  Ese dinero fue obtenido  de un  empréstito otorgado por Inglaterra  al gobierno  venezolano.  Los  dueños de  esclavos recibieron dinero para compensarlos por  las  pérdidas que  tendrían sobre  la  inversión  que  sobre  ellos habían hecho  al  comprarlos.  Los ahora ex esclavos que  habían producido todas las  riquezas que  disfrutaban sus antiguos dueños quedaron libres para morirse  de hambre en los  caminos  de la  patria que en  ese momento les pasaba a pertenecer.  Por  allí  viene  la  deuda que queremos  cobrar los  herederos de   esos negros  y negras  que  sobrevivieron  al  holocausto a  que fueron sometidos durante más de cuatro  siglos. 
La deuda  es  grande  con la  mujer Negra.

Esta deuda no la podemos cobrar legalmente si no  existimos  como parte demandante. Los que realizamos la  demanda debemos  reconocer  que  existimos y  somos  legítimos  herederos de los  hombres  y  mujeres que  por tener  el  color  de la  piel Negra fueron expoliados como  esclavos al servicio  de sus  amos  blancos.  Ese  es el  primer  paso y  el  segundo es que en la Constitucion, (al menos) haya una indicación taxativa  de  que  existimos como habitantes  de esta nación.  Si no  es  así es imposible  que  podamos hacer  una  querella  contra  nadie.  Al no  existir, no  somos.  (¿Me explico?).

Si los que trajeron amarrados en las  inmunda  bodegas de los  barcos negreros a nuestros  antepasados, los hubieran vendidos en calidad  de  esclavos  a los  compradores dueños  de haciendas que  habitaban  esta  región, por  ser oriundos del continente africano, entonces todos los habitantes  de  Venezuela  de origen africano  tendrían  derecho a  demandar;  pero las  cosas  no  sucedieron así: fueron vendidos  como esclavos  porque tenían  el  color  de  piel  negra.  Es  esta la  condición  fenotípica  que los hacia  ser  tratados  como  mercancía  y  no  como  seres  humanos.   Ningún país  del  continente africano me ha  dado la  nacionalidad y menos  me  defendería  si me  identifico como  un  “Afrodescendiente” genérico en un continente que tiene un alto contenido  de población de con otros fenotipos  raciales  que  no  es  precisamente el negro.

Todo lo  anterior  es para explicar las  razones  por  las  cuales es necesario dar dos  pasos antes  de pedir alguna reivindicación o hacer justicia  a la población Negra que hoy sobrevive  en la República  Bolivariana  de Venezuela:
1.-Aceptar los  Negros  y  Negras  que son los  descendientes  de los hombres y  mujeres que fueron traídos  a  este  continente en calidad  de  esclavos y que con sus  antepasados los  antiguos amos y  sus  herederos  tienen una  deuda que cancelar a los Negros y Negras  que sobrevivimos a la barbarie a que  sometieron a  los  nuestros.
2.-En alguna  parte del  estamento legal  de la  República debemos aparecer para así  poder  actuar como  sujetos litigantes  que  nos  permita demandar.

En Derecho,  tanto  el Demandante, como  el  Demandado deben probar  su existencia , pues no  se puede demandar a  alguien que  no existe y menos aceptar ser  demandado por  alguien que  tampoco existe.  En el  caso que  trato  de  explicar, los  herederos  de los  que  vamos  a  demandar  están vivitos  y  disfrutando   las  riquezas que lograron gracias  a nuestros antepasados.  En  cuanto a nosotros  como  demandantes  tenemos  que  probar  que  existimos y  para eso  hay  que aceptar que se  es Negro o Negra y no  reconocerse  como AFRO.

Si  estamos dispuestos  a  salir  del  closet, algo parecido a lo  que  hicieron los  homosexuales, la  demanda podría  prosperar y  hasta  la  podríamos  ganar.
Nota: Con este articulo pretendo  provocar  a  mis  lectores  para que emitan  sus opiniones  y hagan  aportes  al  tema. Mi correo: juanveroes66@hotmail.com   los  está esperando.



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